tag:blogger.com,1999:blog-1662216783148237702.post7638716256266790786..comments2014-11-28T20:01:48.865+01:00Comments on Cosas de Ariño: Otra de silenciososUnknownnoreply@blogger.comBlogger3125tag:blogger.com,1999:blog-1662216783148237702.post-38186918030105189432008-12-08T20:36:00.000+01:002008-12-08T20:36:00.000+01:00Es cierto mis queridos amigos que, a veces, poco s...Es cierto mis queridos amigos que, a veces, poco se puede esperar de los que callan mucho, pero yo añado -y me voy al tópico de enfrente- que, a veces, menos se puede esperar de los que hablan mucho. De hecho hay un refrán que dice: quien mucho habla, mucho yerra.<BR/><BR/>De cualquier forma, os aseguro que ha sido un placer pasar y leer. Seguro que regreso.<BR/><BR/>Un abrazo.Antonio Urdialeshttps://www.blogger.com/profile/02071952423520637218noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-1662216783148237702.post-49266112412475923482008-12-07T12:20:00.000+01:002008-12-07T12:20:00.000+01:00Ramón, tu protagonista y el mío son motivo de brom...Ramón, tu protagonista y el mío son motivo de broma por su escasa locuacidad, por su salida de tono, y por su improcedente léxico; sin embargo, cambiando de signo el análisis, es casi seguro que ambos eran unos muchachos llenos de buena voluntad y de ilusión ante la perspectiva del matrimonio, y esto, bromas aparte, es más importante que la simple anécdota. <BR/><BR/>Todo se puede ver de varias maneras (“todo es según el color...") y el resultado final depende de la comprensión que seamos capaces de tener, especialmente con los defectos de los demás. <BR/><BR/>Gracias por decidirte a hacer el comentario.<BR/><BR/>Salvador MacipeSalvador Macipehttps://www.blogger.com/profile/05075986373318161913noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-1662216783148237702.post-59654892127275335222008-12-04T20:37:00.000+01:002008-12-04T20:37:00.000+01:00Muy locuaz y sicero el mozo.Por aquella época tamb...Muy locuaz y sicero el mozo.<BR/><BR/>Por aquella época tambien, acostumbraban a salír de paseo dominical las parajas, a<BR/>falta de otras distracciones como es natural, y también se dice de<BR/>una de éllas, en concreto del novio, que toda la dialectica paseril con su novia, se reducía a, mirar al cielo en repetidas y continuadas veces, y decir:<BR/>¡ Este tiempo... nos va ha joder...<BR/>¡ Pues... este tiempo... nos va ha joder...<BR/><BR/>Y así de este modo más ó menos, se desarrollaba el tipo en los paseos festivos que realizaban esta pareja de ariñeros, que por prudencia, no me atrevo a desvelar.Anonymousnoreply@blogger.com